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» »Unlabelled » La caverna de Platón y nuestra vida.

Muchos seguramente ya escuchamos o conocemos la alegoría de Platón sobre la caverna por lo cual voy a hacer un pequeño resumen tratando de no alargar mucho el análisis de hoy.



Platón inicia hablando de unos hombres que se encuentran encadenados a en lo profundo de una caverna desde su nacimiento, sin poder salir de ella. Incluso se encuentran imposibilitados a mirar atrás para conocer el origen de sus cadenas.
Ellos permanecen constantemente mirando la pared de la caverna, con las cadenas aferrándolos. Detrás de ellos a cierta distancia y por encima de sus cabezas se encuentra una hoguera que ilumina levemente la zona. Y entre ésta y los encadenados hay un muro.(Platón equipara este muro con las artimañas que realizan los embusteros o embaucadores para que no descubran su truco).
Entre el muro y la Hoguera se encuentran otros hombres que llevan con ellos diferentes objetos que sobresalen por encima del muro, dibujando en la pared la sombra de estos en la pared que miran los encadenados. De este modo ellos ven siluetas de animales, personas, árboles, montañas, etc.


En este punto ya Platón nos posiciona como los hombres que se encuentran dentro de la caverna encadenados. Siendo esas siluetas lo superficial a lo que estamos acostumbrados. Plantea tambien que si uno de los hombres decidiera pasar el muro y caminar hacia la hoguera su luz le molestaria, pero vería una version más real de esos objetos. Incluso si esa persona caminara un poco más y saliera de la caverna la luz de sol le dañaría los ojos, desearía volver a la caverna, pero al quedarse un momento se adaptaría y podría ver la realidad tal cual es. Sin embargo, si este hombre intenta volver a la caverna no lograría ver nada, incluso sus anécdotas sería motivo de burla e incredulidad.

Esto nos lleva a preguntarnos ¿En que parte de la caverna estamos?¿Queremos salir? y muchas otras tantas preguntas.

Por último voy a citar textualmente el aporte de la gente de Psicología y Mente un sitio que habla mucho de estos temas que, a mi parecer, nos permite entender otras interpretaciones o guiarnos con las nuestras propias:


1. Los engaños y la mentira
Los engaños, que pueden surgir de una voluntad de mantener a los demás con poca información o de la falta de progreso científico y filosófico, encarnaría el fenómeno de las sombras que desfilan por la pared de la caverna. En la perspectiva de Platón, este engaño no es exactamente el fruto de la intención de alguien, sino la consecuencia de que la realidad material sea tan solo un reflejo de la verdadera realidad: la del mundo de las ideas.
Uno de los aspectos que explican por qué la mentira impacta tanto en la vida del ser humano es que, para este filósofo griego, está compuesta por aquello que parece evidente desde un punto de vista superficial. Si no tenemos motivos para cuestionar algo, no lo hacemos, y su falsedad prevalece.

2. La liberación
El acto de liberarse de las cadenas serían los actos de rebeldía que solemos llamar revoluciones, o cambios de paradigma. Por supuesto, no es fácil rebelarse, ya que el resto de la dinámica social va en sentido contrario.
En este caso no se trataría de una revolución social, sino de una individual y personal. Por otro lado, la liberación supone ver cómo muchas de las creencias más interiorizadas se tambaleen, lo cual produce incertidumbre y ansiedad. Para hacer que este estado desaparezca, es necesario seguir avanzando en el sentido de ir descubriendo nuevos conocimientos. No es posible quedarse sin hacer nada, según Platón.

3. La ascensión
La ascensión a la verdad sería un proceso costoso e incómodo que implica desprenderse de creencias muy arraigadas en nosotros. Por ello, es un gran cambio psicológico.
Platón tenía en cuenta que el pasado de las personas condiciona el modo en el que experimentan el presente, y por eso asumía que un cambio radical en la manera de entender las cosas tenía que acarrear necesariamente malestar e incomodidad. De hecho, eso es una de las cosas que quedan claras en su forma de ilustrar ese momento mediante la idea de alguien que trata de salir de una cueva en vez de permanecer sentado y que, al llegar al exterior, recibe la luz cegadora de la realidad.

4. El retorno
El retorno sería la última fase del mito, que consistiría en la difusión de las nuevas ideas, que por chocantes pueden generar confusión, menosprecio u odio por poner en cuestión dogmas básicos que vertebran la sociedad.
Sin embargo, como para Platón la idea de la verdad estaba asociada al concepto de lo bueno y el bien, la persona que haya tenido acceso a la realidad auténtica tiene la obligación moral de hacer que el resto de personas se desprendan de la ignorancia, y por lo tanto ha de difundir su conocimiento.
Esta última idea hace que el mito de la caverna de Platón no sea exactamente una historia de liberación individual. Es una concepción del acceso al conocimiento que parte de una perspectiva individualista, eso sí: es el individuo el que, por sus propios medios, accede a lo verdadero mediante una lucha personal contra las ilusiones y los engaños, algo frecuente en los enfoques idealistas al fundamentarse en premisas del solipsismo. Sin embargo, una vez el individuo ha alcanzado esa fase, debe llevar el conocimiento al resto.
Eso sí, la idea de compartir la verdad con los demás no era exactamente un acto de democratización, tal y como la podríamos entender hoy día; era, simplemente, un mandato moral que emanaba de la teoría de las ideas de Platón, y que no tenía por qué traducirse en una mejora de las condiciones materiales de vida de la sociedad.

Fuente de Citado: https://psicologiaymente.net

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1 comentarios:

  1. Que rápido se movería el mundo si todos dijeran la verdad... Por mas pequeña que parezca, una mentira es una mentira... Y no hace bien en ningún sentido porque es como un dominó que no se acaba... Y si todos dudaramos de todo además, accederiamos a cualquier conocimiento que quisiéramos o reafirmariamos con más fuerza lo que ya sabemos

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